La depilación como factor cultural

La depilación como factor cultural a lo lago de la historia

El culto al cuerpo ha estado, esta y estará en todas las culturas que han poblado la tierra a lo largo de la historia, ahora bien la forma de interpretar ese culto al cuerpo difiere y mucho según las zonas o tiempos culturales.

De la antigüedad a la actualidad

El culto al cuerpo se ha producido como se ha dicho a lo largo de la historia y en lo que se refiere por ejemplo a la depilación del cuerpo humano se han producido grandes transformaciones a lo largo de la historia, desde las más remotas y ancestrales técnicas de nuestros antepasados para mantener el cuerpo (en ese caso femenino) libre de vello indeseado, hasta las modernas técnicas de depilación laser empleadas de forma unisex en la actualidad.

Pero es que ye no solo con el tiempo la forma de depilarse lo que se va transformando sino que es la acción de depilarse en sí mismo, es decir una cosa es la  “necesidad” de depilarnos y otra cosa es la técnica que utilizamos para cubrir esa necesidad. Por ejemplo si en la antigüedad dijésemos que hoy en día el hombre se depila igual que la mujer o que la mujer se rasura sus partes genitales podrían considerarlo una autentica barbaridad, pues en la mayoría de culturas antiguas por ejemplo consideraban el vello masculino cuanto más frondoso y extenso mejor pues era visto como un signo de fuerte virilidad, de virilidad guerrera, del animal que tiene que llevar cobijo a casa, de ahí frases por ejemplo como las que comparan el vello masculino con el vello de los osos. Hoy en la actualidad eso se ha transformado y el hombre ya no es aquel animal aguerrido y depredador, que tiene que ir a cazar, sino que hoy el hombre tiene en el centro de sus necesidades, la sensibilidad, el atractivo y el cuidado personal.

De una región territorial a otra

Pero no solo entre la antigüedad y la actualidad hay diferentes formas de entender la estética en general y la depilación en concreto, pues es dentro de la actualidad misma donde existen numerosas e importantes diferencias en la percepción del vello masculino o femenino, pues ni en todas las culturas está bien visto aun que el hombre se rasure o viceversa y tampoco que la mujer se depile todas las zonas del cuerpo. Así pues, hoy por ejemplo nos encontramos grandes diferencias entre una mujer o un hombre occidental, asiático, árabe o de cualquier otra zona.