Cuidado con las cremas anestésicas en la depilación láser

Cuidado con las cremas anestésicas en la depilación láser

Todos sabemos perfectamente que hacer un mal uso de medicamentos o de pomadas nos puede acarrear riesgos y consecuencias de diversa envergadura, como ocurre por ejemplo con las cremas anestésicas empleadas en depilación láser.

Antes de aplicarnos cualquier tipo de crema o pomada anestésica es importante informarse sobre las posibles complicaciones o posibles efectos adversos para poder prevenir futuros problemas.

Muchos profesionales de la salud conocen e informan a los usuarios sobre las consecuencias dañinas a causa del uso abusivo e indiscriminado de cremas o pomadas con efecto anestésico.

Uso indebido de las cremas anestésicas

Normalmente este tipo de cremas son empleadas o utilizadas en procedimientos de tipo estético, especialmente durante las sesiones de depilación láser.

Estas cremas son consideradas en realidad medicamentos que contienen determinados componentes que provocan unos efectos adversos completamente desconocidos por muchos de  los usuarios que las utilizan.

El principal riesgo que provoca este tipo de anestésico es que ya que se aplica directamente sobre la piel puede ser absorbido por nuestro organismo llegando a provocar graves efectos sobre el usuario como por ejemplo taquicardia o incluso problemas de tipo respiratorio. Por otro lado, estas cremas anestésicas cuando son absorbidas pueden ocasionar una sinergia con otros medicamentos, es por ello por lo que este tipo de pomadas solamente pueden ser adquiridas con receta médica.

Cualquier persona que tenga en mente realizarse un tratamiento de depilación láser y aplicarse este tipo de sustancias, tendrá que consultar previamente con su médico.

Prohibiciones

Cuando visitemos un centro de depilación láser en el cual nos receten una crema de este tipo, deberemos consultar con un especialista antes de proceder a su aplicación.

Si aún después de consultar a nuestro especialista, éste nos recomienda su uso, tenemos que tener en cuenta la cantidad de sustancia que aplicamos en nuestra zona corporal a depilar. Siempre deben utilizarse pocas cantidades y en pequeñas extensiones de nuestra piel. Por ejemplo, si nos centramos en el uso de estas cremas en tratamientos de depilación láser, no se deberá aplicar en zonas como las piernas enteras por su amplia extensión y mucho menos vendarse, ya que esto puede incrementar la absorción del producto.

También se debe evitar su uso sobre zonas de nuestra piel que se encuentren dañadas o irritadas, ya que si por ejemplo posteriormente se produce una quemadura durante la sesión de depilación láser y después se aplica el producto sobre la lesión la absorción es mucho mayor.

Otro factor que se debe tener en cuenta es el aumento de temperatura en las zonas que son tratadas ya que también provoca una mayor absorción, por lo que se evitará la aplicación de calor y el uso de ropas demasiado ajustadas que favorezcan la absorción.